A este Levante de Calero, equipo de autor, le quedan once curvas para alcanzar la cima, todo un mundo por delante.
Ningún granota termina de creerse el liderato. Demasiadas cornadas nos hemos llevado en los últimos tiempos como para ahora ser tan ilusos de pensar que vamos a subir seguro entre los dos primeros así, sin más. Como si fuera sencillo. Como si pensáramos ganar todo de aquí a final de temporada, jugando como jugamos y apurando por sistema hasta el descuento para sumar los tres puntos fuera de casa. Ojalá fuera así. Pero no nos lo terminamos de creer.
Ni siquiera los optimistas más recalcitrantes podíamos sospechar que seríamos lideres a estas alturas de temporada. Por eso no queremos hacernos demasiadas ilusiones para no volver a llevarnos otro chasco monumental.
Los granotas vivimos permanentemente con la mosca detrás de la oreja. El ascenso todavía lo vemos muy lejano y queremos mantener la cabeza fría. Ni lo pensamos para ahorrarnos disgustos futuros. Paso a paso. Pero lo cierto es que ahora nos hemos convertido en los máximos favoritos. Lo tenemos todo de cara, aunque ya ha habido hasta siete clubes diferentes liderando la categoría en las 31 jornadas disputadas.
Según la última predicción del Big Data, Besoccer indica que el Levante acabará primero con 74 puntos (18 más de los actuales) y el Racing de Santander segundo con 73 (17 más). Ocuparían el play off Elche (72 puntos), Almería (70), Mirandés (70) y Huesca (66 puntos). Se quedarían fuera el Real Oviedo (66), Granada (64) y Cádiz, noveno con 62 puntos. Según el algoritmo, el Levante tiene un 62% de opciones de quedar entre los seis primeros. Solo son proyecciones futuribles, números y matemáticas.
"No nos queremos hacer demasiadas ilusiones, pero lo cierto es que ahora nos hemos convertido en los máximos favoritos, lo tenemos todo de cara"
En la vida real, en el césped, toca apretar los dientes en el momento decisivo. Este tramo final, según la penúltima Calero-metáfora, podría equipararse “a la subida al Tourmalet con sus doce curvas finales”. En realidad, el míster se refería a las míticas elipses en forma de herradura de la subida del Alpe d’Huez, con una pendiente media del 8,4%, que además tampoco son doce sino veintiuna, pero eso no importa. Melones, mortadelas, globetrotters… qué más da. Lo importante es la idea y que, con la victoria en El Alcoraz, ya hemos superado la primera curva frente a un rival directo. “Solo” quedan once más, seis en casa y cinco fuera. Además, hay enfrentamientos contra rivales directos como Almería, Racing (en casa), Oviedo y Elche, lo que otorga valor doble a la victoria.
La siguiente curva, el domingo frente a los correosos orelluts que ya nos dieron un repaso en Castalia. ¿Quién no recuerda -y lamenta- los errores flagrantes cometidos en ese partido por ese veterano de Getafe al borde de la jubilación? No importa que los albinegros estén en Magdalena o que sea un equipo hermano. El primer error de los jugadores granotas sería confiarse, creerse superiores y no salir a dar el cien por cien. No queremos perder la cabeza, ni siquiera aunque sea por el CD Castellón. O no.
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