El Burgos las tuvo de todos los colores, pero no pudo superar el muro de Andrés Fernández. Estas son las claves del empate en El Plantío.
Baile local
Contra un Burgos con las ideas claras y juego directo, los granotas echaron en falta solidez en la medular. Miñambres buscó conceder poco para salir al contragolpe con Fabrício como única pieza arriba, pero los burgaleses cedieron el balón a un equipo que se quedó anulado. Los locales, que saben bien a lo que juegan, no permitieron nada a los de Orriols en la primera parte. Además, demostraron no necesitar la pelota para dominar. Tras el golazo de Sancris, vinieron los mejores minutos del Burgos. Gracias a su verticalidad, llegaron constantemente sin tener demasiado la pelota, obligando a Andrés a dar un recital. Hacia los últimos minutos los burgaleses asediaron con todo, pero el meta murciano impidió que se marcharan varios goles por delante.
Los cambios
Sabíamos que a Miñambres se le complica aquello de cambiar de entrenador, pero en El Plantío descubrimos que también le cuesta cambiar jugadores. Pese a la mala primera mitad, Felipe no tuvo prisa para hacer los cambios. Más tarde, motivado por el despertar granota, los retardó aún más, hasta que el definitivo empate le dio pie a posponer la sustitución de Bouldini. Entre pitos y flautas, hasta el minuto 80 no se produjo el primer cambio granota. Lo que no se entiende es la insistencia en dejar a un Iván fundido y, en cambio, relevar a Fabrício, que pidió seguir y aun tenía gasolina como se demostró en su última jugada de autor.
Resurgir
El partido de hoy podría ser un resumen de la temporada hasta ahora. Empiezas bien, luego resulta que no, luego parece que sí, pero al final empatas, como siempre. En la segunda mitad, el Levante aprovechó que el Burgos se echó atrás para asediar más a Caro. El gol llegó por una gran conexión entre Dela y Brugué. En la segunda parte Pablo estuvo más cerca de los últimos metros y el equipo llegó con más gente, viniéndose arriba tras la igualada. Pero, cuando todo acababa, el equipo cayó en el conformismo. Pudiendo ganar se dedicó a amarrar el empate. Mención aparte merece Andrés Fernández, salvador del Levante. Por abajo, por arriba, con la palomita, atrapándola o incluso degustándose con unos toques, el murciano dio un recital de paradas en El Plantío.
¿Gran punto?
Ahí está. Al Levante le pareció bueno el punto. Y lo sería, de no ser porque estamos ya a cuatro del playoff con toda la jornada por delante y cada vez queda menos. Hay una tabla en la que sí vamos líderes en solitario: la de los empates.,14 ya esta temporada, 8 de ellas lejos del Ciutat. Ahora la cuesta sigue contra Elche y Valladolid. Con solo once partidos por disputarse, los siguientes seis puntos se antojan decisivos para el desenlace de esta amarga campaña.
M.V.P: ANDRÉS | INCOMBUSTIBLE: GIORGI | VAYA DÍA: MARAS |
Recital asombroso. | El rottweiler volvió tan enchufado como siempre. | Mostró sus limitaciones pero demostró oficio. Hay tardes buenas y tardes Maras. |
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